Jhon Núñez es representante por curul de víctimas que fue cercano a parapolíticos en Caquetá, donde le han entregado millonarios contratos a su empresa de construcción.

El representante a la Cámara Jhon Fredy Núñez mantuvo un perfil bajo en el Congreso por 29 días hasta que esta semana se quejó porque, según él, ha “aguantado hambre” en las jornadas de trabajo legislativo, a pesar de que su salario mensual asciende a $35,3 millones.

Con esa afirmación, Núñez dejó claro que se opondrá a que le bajen el sueldo, aunque esa cifra resulta irrisoria frente a la fortuna que ha amasado en los últimos años. Este diario indagó sobre el pasado de este congresista y encontró que este ingeniero civil fue el fundador de la empresa de construcción Ingeo Núñez Zomac, que registra $1.834 millones de patrimonio neto.

El “ingeniero”, como se le conoce en Caquetá, lleva a cuestas una serie de hechos turbios que empañan su hoja de vida. Uno de los más polémicos es su antigua cercanía con el parapolítico exgobernador de Caquetá, Álvaro Pacheco, quien fue condenado a 7 años y medio de cárcel por sus vínculos con el Frente Sur de Anquíes del Bloque Central Bolívar de las extintas AUC.

Además, a Núñez se le reconoce en ese departamento como un viejo líder político, pues aspiró –sin éxito– al Senado en 2009, a la alcaldía de Florencia en 2011 y a la Asamblea del Caquetá en 2015. Ese pasado político no le impidió lanzarse a las curules de víctimas, aunque se presentó una reclamación en el Consejo de Estado, que no prosperó.

A esto se le suma la denuncia del periodista Melquisedec Torres, quien dice que Núñez ha incumplido cuotas alimentarias de uno de sus hijos. Este diario contactó a la mujer que denunció al congresista, pero al cierre de esta edición su abogada no había remitido los respectivos documentos.

Tras llegar al Congreso por la curul de paz, Núñez –quien prefirió no responder a las preguntas deucjos medios– logró aterrizar en las toldas petristas y ya se le ha visto con Gustavo Petro, David Racero y otros.