Un juez administrativo del circuito de Cartagena resolvió la demanda que habia interpuesto El Ministerio de Cultura y el tribunal ordenó demoler el edificio
Un juez administrativo del circuito de Cartagena resolvió la acción popular que había iniciado el Ministerio de Cultura en 2021 contra el Distrito de Cartagena de Indias, la Curaduría número uno de esa misma ciudad y una promotora de construcción por permitir el desarrollo del edificio Aquarela, que ahora tendrá que demolerse.
Según el fallo del juez, el Distrito de Cartagena y Promotora Calle 47 tendrán un plazo de tres meses para contratar los estudios técnicos que les permitan identificar y planear el mejor método posible de demolición del Multifamiliar VIS Aquarela, cuya construcción solo llegó hasta la primera etapa. Los costos de la demolición también estarán a su cargo, de manera proporcional “teniendo en cuenta que la sociedad Promotora Calle 47 S.A.S., está obligada solo a la restitución de 619.59 m2”.
Además, el fallo dice que con la construcción del edificio se vulneró el derecho colectivo a gozar del espacio público, así como a la utilización y defensa del espacio público. También se amenazó el derecho colectivo de defender el patrimonio público.
Y es que el pasado primero de diciembre de 2022 se venció el plazo para que el Gobierno le presentara a la Unesco un informe completo con sus acciones para preservar el patrimonio cartagenero, después de advertir justamente que el edificio Aquarela afectaba la arquitectura de Cartagena, que es patrimonio declarado por la organización internacional.
Desde 2019, el edificio que se construyó debajo del Castillo de San Felipe de Barajas debía demolerse por solicitud de la Unesco ya que afecta el paisaje de la zona histórica de la ciudad, al obstruir la vista directa al mar desde el castillo, que hace parte de la arquitectura por la que Cartagena es Patrimonio de la Humanidad.
Por otro lado, el juez en su decisión de este viernes levantó las medidas cautelares que había sobre la construcción del edificio desde 2015 para dejarlas sin efecto, incluidas las medidas de la Curaduría Número Uno de Cartagena que permitieron la construcción del Aquarela.