El establecimiento deberá prohíbir el ingreso a menores de edad, así como también polarizar los vidrios y ventanas para evitar el exhibicionismo
En los últimos días ha sido tendencia constante en redes sociales ‘Severo Sinvergüenza‘, el emprendimiento en Cali famoso por sus waffles en forma de miembro masculino y su polémica estrategia de venta.
El establecimiento comercial se viralizó muy rápido gracias a una serie de videos en los cuales se aprecia como Ray Cabrera, un venezolano que vive hace seis años en Colombia, trabajador del lugar; realizaba una serie de movimientos obscenos simulando un acto de penetración con el waffle, al mismo tiempo que da dos cachetadas a una cliente, entre otras escenas de mayor calibre.
La situación causó indignación en gran parte de la ciudadanía caleña, lo que llamó la atención de la Secretaría de Seguridad de Cali, que intervino la noche del seis marzo en el establecimiento comercial y estableció una serie de restricciones para que este pueda seguir funcionando.
Restricciones impuestas a Severo Sinvergüenza
El establecimiento deberá prohíbir el ingreso a menores de edad, así como también polarizar los vidrios y ventanas para evitar el exhibicionismo y que desde fuera se pueda apreciar la temática del lugar.
Del mismo modo no se podrá dar golpes o cachetadas entre clientes y vendedores. Asimismo tendrán que señalizar y controlar el compartimiento dentro del local.
Cabe mencionar que esta visita fue anunciada en horas de la mañana por el Secretario de Seguridad, Jimmy Dranguet, quien aseguró que se debe mantener el respeto por la ciudadanía.
“Hemos visto los videos y son bochornosos, no es la Cali que queremos representar. Si el establecimiento no cumple la normativa correspondiente, será sancionado, este tipo de actividades con actos obscenos no se pueden realizar”, aseguró.
El funcionario añadió que este establecimiento, al tener una vitrina de cristal que permite ver hacia adentro, expone a niños y niñas a actos que rayan en la obscenidad.
“Envío un mensaje a los empresarios y la ciudadanía para que tenga en cuenta que hay lugares, horarios y formas de ejercer una actividad con un contenido sexual, sin que vulnere los derechos de nuestros niños, niñas y adolescentes”, complementó.